Una opción saludable, colorida y deliciosa, estos pimientos rellenos de quinoa son perfectos como plato principal o acompañamiento. ¡Fáciles de preparar y llenos de sabor!
4 pimientos grandes
1 taza de quinoa cruda
2 tazas de agua o caldo
1 zanahoria rallada
1 lata de maíz dulce
50 g de queso rallado
Sal y pimienta al gusto
1
Cocina la quinoa
Cocina la quinoa lavada, en agua o caldo a fuego lento, hasta que absorba todo el líquido (aproximadamente 15 minutos). Déjala enfriar ligeramente.
2
Precalienta el horno y prepara los pimientos
Precalienta el horno a 180°C. Corta la parte superior de los pimientos, retira las semillas y límpialos por dentro.
3
Prepara el relleno
En un bol, mezcla la quinoa cocida con la zanahoria rallada, el maíz dulce y el queso rallado. Corrige la cantidad de sal y pimienta al gusto.
4
Rellena los pimientos
Llena los pimientos con la mezcla de quinoa, presionando ligeramente para que queden bien compactos.
5
Hornea los pimientos
Coloca los pimientos rellenos en una bandeja y hornéalos durante 20-25 minutos, hasta que estén tiernos y ligeramente tostados.
6
Sirve y disfruta
Saca los pimientos del horno, déjalos reposar unos minutos y sírvelos calientes como plato principal o de guarnición.
Tarta de calabacín y ricotta
Una tarta ligera y cremosa que combina el frescor del calabacín con la suavidad del queso ricotta. Ideal para cualquier comida o cena rápida.
Dificultad Baja
1
Prepara los calabacines
Lava y ralla los calabacines. Escúrrelos bien presionándolos para eliminar el exceso de agua.
2
Precalienta el horno y mezcla el relleno
Precalienta el horno a 180°C. En un bol, combina los calabacines rallados con la ricotta, el huevo, el queso parmesano, sal, pimienta y una pizca de nuez moscada.
3
Monta la tarta
Coloca la masa en un molde para tarta, ajustándola bien a los bordes. Vierte la mezcla de calabacín sobre la base y alísala con una espátula.
4
Prepárate para hornear
Hornea la tarta durante 25-30 minutos, o hasta que el relleno esté dorado y firme al tacto
5
Sirve y disfruta
Deja enfriar ligeramente antes de cortar y sirve como entrante o plato principal.
Dificultad Baja
Crema de brócoli
Una sopa espesa, reconfortante y nutritiva. Esta crema de brócoli es perfecta para los días fríos o cuando buscas algo saludable y fácil de hacer.
1 brócoli
1 cebolla
2 dientes de ajo
1 litro de caldo de verduras
200 ml de crema para cocinar
1
Sofríe la cebolla y el ajo
En una olla, sofríe la cebolla y el ajo picados con un poco de aceite hasta que estén tiernos y transparentes.
2
Cocina el brócoli
Añade el brócoli troceado y el caldo de verduras. Cocina durante 15 minutos, hasta que el brócoli esté tierno.
3
Tritura y agrega la crema
Tritura todo con una batidora hasta obtener una textura suave. Añade la crema para cocinar y mezcla bien. Ajusta con sal y pimienta al gusto.
4
Sirve y disfruta
Sirve caliente, acompañado de pan crujiente o picatostes si lo deseas
Magdalenas de calabaza
Dulces, esponjosas y aromáticas, estas magdalenas de calabaza son ideales para un desayuno o merienda que sorprenderá a todos.
200 g de calabaza cocida
2 huevos
150 g de azúcar
100 ml de aceite de girasol
180 g de harina de trigo
1 cdta. de levadura en polvo
1/2 cdta. de canela en polvo
1 pizca de sal
Dificultad Media
1
Precalienta el horno
Precalienta el horno a 180°C y coloca cápsulas de papel en un molde para magdalenas.
2
Mezcla los ingredientes húmedos
En un bol grande, bate los huevos con el azúcar hasta que la mezcla esté espumosa. Añade el puré de calabaza y el aceite, y mezcla bien hasta que todo esté bien integrado.
3
Añade los ingredientes secos
Tamiza la harina con la levadura, la canela y la pizca de sal. Incorpora estos ingredientes secos a la mezcla húmeda poco a poco, mezclando con una espátula hasta obtener una masa homogénea.
4
Llena los moldes
Rellena las cápsulas de papel hasta 2/3 de su capacidad con la mezcla de masa.
5
Prepárate para hornear
Hornea durante 20-25 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro de una magdalena, salga limpio.
6
Deja enfriar y disfruta
Deja enfriar las magdalenas en una rejilla antes de saborearlas.